Páginas

miércoles, 26 de octubre de 2016

El especismo

Hola a todos.

Hoy me gustaría hablaros sobre un tema bastante importante y que es a menudo ignorado: el especismo. ¿Qué es el especismo? Pues es la discriminación en función de una especie. 

Desde que éramos pequenos nos han educado de una forma en la que casi todos los animales deben/pueden sufrir sólo por nuestro placer. Es decir, que justificamos el sufrimiento de los animales con el apetitoso filete que se me apetece comer. Justificamos el de todos excepto el de dos animales de especies diferentes: el gato y el perro. 

Si le preguntas a una persona normal sobre si comería un filete de perro o gato en un restaurante, probablemente te ponga cara de asco y te diga que no. Si le preguntas a una personal normal si comería un filete de cerdo o un filete de res, te mirará sorprendido y te dirá directamente que sí e incluso te hará saber lo buenos que están.

Acostumbrados a convivir con ellos como animales de compañía desde que nacimos, no se nos ocurre ninguna justificación para que un perro o un gato pueda sufrir, ¿pero todo esto es normal en nuestra especie o lo hemos aprendido? Os voy a poner el típico ejemplo: Si pones a un niño pequeño en una trona y le das un conejo y una manzana, ¿qué es lo que intentará comer? Probablemente intente jugar con el conejo e intente comerse la manzana.

Llevo casi dos años siendo vegetariana y hace poco decidí hacerme vegana. A lo largo de este tiempo siempre han cuestionado mi alimentación, pero no sólo porque según ellos vaya a tener carencias nutricionales, si no porque muchos no están al corriente del sufrimiento que tienen los animales en el matadero o lo están pero intentan cerrar los ojos y/o negarlo. Cuando intento enseñarles el sufrimiento de estos animales ya sea poniéndoles un vídeo o contándoles lo que pasa en los mataderos con mis propias palabras niegan querer ver dicho vídeo y querer escuchar mis explicaciones. 

Siempre me dicen: ''Ay hija, no me cuentes eso que es muy desagradable''. Es algo bastante contradictorio. Si elegimos un estilo de vida tenemos que seguir adelante con las responsabilidades que ello conlleva y entre ellas, aunque a muchos no les guste que lo diga, es el sufrimiento de los animales. Es decir, si decides comerte ese filete, lo mínimo es que sepas con qué y cómo está hecho y después hacer tu propia elección. 

Sólo defendemos a estos animales cuando vemos con nuestros propios ojos el maltrato y el sufrimiento. Es el caso de los animalistas que comen carne. Se manifiestan (si lo hacen) en contra de la tauromaquia. ¿Por qué? Pues porque ven con sus propios ojos cómo el toro sufre por cada herida que el humano le acomete, es algo público. Entonces les es más fácil empatizar con el animal. 
Sin embargo cuando la hembra está en el matadero nada más que para satisfacer nuestros placeres y la torturan y maltratan callan.

Todo esto último que he dicho es bastante polémico y puede resultar molesto para aquellos que se consideren animalistas y coman carne. En mi opinión, y reitero que es mi opinión, quizás no sea exactamente animalismo, más bien amor por los animales que se encuentran a nuestro lado
. Los animalistas defienden los derechos de todos y cada uno de los animales, derechos que en el matadero los animales no tienen. Cuando aceptamos comernos un filete estamos participando indirectamente en esta tortura de animales, por mucho que duela saberlo. Es posible no tener el conocimiento de todo esto, pero si alguien intenta hacértelo saber por lo menos no rechazar esta información y partir de ahí hacer lo que queramos. 

No quiero parecerme superior a nadie por mis elecciones alimentarias. Hace poco yo también estaba comiendo carne y hartándome de pulpo. Y hace aún más poco estaba saboreando ese queso camembert que tanto me gusta. También me dije que nunca dejaría de comer huevos siendo vegetariana. Decidí hacerme vegana al ver a lo que estaba participando al comerme ese queso y esos huevos. Mi único fin es informar sobre lo que comemos, ya que tenemos derecho a saberlo. No quiero ofender a nadie pero, ¿cómo decir la verdad sin ofender? 

Me quedo con un párrafo del mito de la caverna: 

''Y si tuviera que discriminar de nuevo aquellas sombras, en ardua competencia con aquellos que han conservado en todo momento las cadenas, y viera confusamente hasta que sus ojos se reacomodaran a ese estado y se acostumbraran en un tiempo nada breve, ¿no se expondría al ridículo y a que se dijera de él que, por haber subido hasta lo alto, se había estropeado los ojos, y que ni siquiera valdría la pena intentar marchar hacia arriba? Y si intentase desatarlos y conducirlos hacia la luz, ¿no lo matarían, si pudieran tenerlo en sus manos y matarlo?''.